El Islam fragmentado: Fanatismo, poder y religión.

LA HISTORIA ES UN HECHO. ORÍGENES DE LA VIOLENCIA SECTARIA EN EL ISLAM 

Se han cometido muchos abusos en el nombre de la religión y la verdad a lo largo de la  Historia. En el caso del Islam esto es igualmente cierto. La muerte por las armas como en  aras de la verdad y en pro de mantener o acceder al poder y al gobierno del califato existe en el Islam desde la misma muerte de Mahoma. Las tensiones por la sucesión de Mahoma  degeneraron finalmente en lo que los musulmanes conocen como la gran guerra civil. Es en  la batalla de Siffin en el 6572 donde aparecen por primera vez las tres confesiones del Islam:  chiíes o seguidores de Alí, ortodoxos o suníes y jariyíes o los que no se sometieron al  arbitraje. 

La batalla de Kerbala en el 680 y la trágica muerte del sucesor de Alí, Husayn, así como el  asesinato o cárcel de los imanes posteriores, marcará el principio del cisma entre suníes y  chiíes haciendo que a día de hoy sean dos confesiones prácticamente irreconciliables. El martirio de Husayn, rito fundamental en la creencia chií se conmemora todos los años recordando a los fieles su compromiso con la lucha, a cualquier precio, contra todo aquello  que se considere injusticia. 

Con el paso del tiempo las diferencias doctrinales en los chiíes y suníes fueron  incrementándose. La creencia en el clero, la veneración de los santos, el sello de la profecía,  el regreso del imán oculto son factores que diferencian a la rama suni y chií. A ojos de un  observador externo claramente es más lo que une a estas dos ramas que lo que las separa,  sin embargo un largo proceso de radicalización y odio visceral ha degenerado en lo que  parece la imposibilidad de reconciliación y el fratricidio. 

Se estima que entre el 10 y el 20 por ciento de los musulmanes son chiís. Tradicionalmente  se asocia el chiismo con Irán sin embargo esta confesión islámica, al igual que el islam suní,  tiene varias ramas y diferentes escuelas de pensamiento. Entre el 75 y 90 por ciento de los  musulmanes son suníes mientras que la pequeña minoría restante son los jariyies. Es de  reseñar que algunas sectas suníes han recibido el nombre de jariyies aunque esto se produce  más por la analogía del modus operandi de sus integrantes con los primeros jariyies que por  su etimología y creencias.
 
En estos tiempos asistimos a un ligero y casi desapercibido, pero muy importante cambio en  las reglas del juego entre las diferentes facciones islámicas beligerantes. El calado es tal que  hace que nos planteemos no ya si existe un único y verdadero Islam sino hasta dónde llega la  auténtica guerra civil entre las diferentes confesiones, ramas y sectas islámicas. Si antes el  enemigo era el infiel, entendido como aquel no musulmán, ahora el enemigo es también  aquel musulmán que aun perteneciendo a la misma confesión no pertenezca a la misma  escuela de pensamiento. 

CHIISMO 
Las ramas del islam chií se identifican, normalmente por el número de imanes que veneran. La rama principal considera que hubo 12 imanes. De ahí que se les denomine frecuentemente como “duodecimanos”. Es la mayoritaria en Irán y es la que normalmente  se identifica sin más con el islam chií. A esta rama pertenecen también muchos de los chiíes de Líbano. 

La segunda rama son los “septimanos” o “ismailíes”, quienes reconocen sólo a los primeros siete imanes. La mayor parte de este colectivo vive en Pakistán, India y Asia central, pero también hay una minoría en Siria y otros grupos en Líbano, Omán, Yemen, Bahréin, etc. En el siglo XI esta rama dio origen a la creación de la religión drusa. 

El tercer grupo, conocido como los “zaidíes”, vive casi exclusivamente en el norte de Yemen. Sólo aceptan la existencia de cinco imanes. Durante siglos, el imán zaidí fue el dirigente de Yemen, hasta el fin del imanato en 1962.  La peculiar comunidad “alauí” presente en Siria, Líbano, Turquía e Irak se cuenta, a  menudo, como una heterodoxa rama chií. 

La revolución Islámica. Irán, un vecino inquietante 

El Irán de finales del siglo XV era un caos de reinos de Taifas. Irak, Yazd, Semnán, Firuzkuh, Diarbakir, Kashán, Jorasán, Kandahar, Balj, Kermán y Azerbaÿán eran estados independientes y rivales entre sí. En una serie de campañas implacables, Ismail Ibn Haidar5, se apoderó de la mayor parte de estos principados, entró en Herat y Bagdad e hizo de Tabriz la capital de su nuevo imperio (1502).
 
El chiismo se convertía entonces en la religión oficial del actual Irán, siendo el imperio persa, el baluarte de esta confesión. El Sah de Persia introdujo el chiismo como elemento aglutinante y homogeneizador de su heterogéneo imperio de modo que le ayudase a formar un frente contra los califas suníes.
 
La expansión del chiismo se truncó precisamente por las mismas razones por las que Ismail lo eligió. Irán no era un imperio de etnia árabe y no tenía buenas relaciones con los representantes sunís, árabes en un primer momento. Las dinastías de los Qajar y después de los Pahlavis mantuvieron la oficialidad del Islam chií como religión de Estado. 

Un cambio radical se produce en el escenario estratégico cuando en enero de 1979 el Ayatolá Sayed Ruholá Musavi Jomeini alcanzó el poder en Irán. Había renacido la primera potencia chií después de muchos siglos. El gobierno de Teherán se mantuvo proactivo y no conforme con establecerse solo en Irán se forjaron lazos y alianzas con países afines.
 
Teherán estableció una estrecha alianza con Siria, gobernada por la minoría chií de los alauíes. Se creó Hezbollah en el sur del Líbano y en unos años la organización ha pasado a disponer de más armamento y medios que el propio ejército libanés. Así mismo, en Irak, la caída del régimen de Saddam Hussein ha dejado a los chiíes una importante cuota de poder.
 
De esta manera nace el corredor de influencia chií Líbano-Siria-Irak-Irán. El relativamente nuevo actor de Oriente Medio ha sido capaz de inquietar a las potencias suníes, haciendo revivir las antiguas luchas por las cuotas de poder en el escenario estratégico y combatiendo en trincheras casi tan antiguas como el mismo Corán. 

Armenia y sus curiosas relaciones internacionales Armenia es un ejemplo claro de que los intereses nacionales y la lucha por el poder rivalizan con los vínculos o lazos que se forjan con la religión. 

Armenia linda con Turquía por el oeste, con Georgia por el norte, con Azerbaiyán por el este y con Irán por el sur. Armenia es el país cristiano más antiguo del mundo. Sus relaciones con Turquía y Azerbaiyán, ambos musulmanes, está francamente deteriorada; con el primero por razones del genocidio de 1915 y con el segundo por la disputa de los territorios de Nagorno Karabaj.
 
Las relaciones con Georgia, de religión cristiana, son cordiales. Por lógica cabría pensar que las relaciones de Armenia con Irán, país musulmán, que ha apoyado incondicionalmente a otras causas musulmanas deben ser malas. Nada más lejos de la realidad. Armenia tiene en Irán un excelente aliado. Armenia, deficitaria energéticamente, importa grandes cantidades de petróleo y gas de Irán. Sus fronteras son completamente permeables. Además, Armenia es para los iraníes turísticamente muy atractiva, ya que pueden encontrar a pocos kilómetros muchas libertades no permitidas en su estricto país. 

La razón de estas buenas relaciones, más poderosa, en este caso, que los vínculos religiosos entre dos países de mayoría chií, es la disputa velada entre Azerbaiyán e Irán por el territorio denominado Azerbaiyán Iraní. 
 
SUNISMO 

Los seguidores del islam suní se dividen en cuatro grandes escuelas teológicas, llamadas según sus fundadores Malekí, Chafeí, Hanafí y Hanbalí Salafismo, reacción ante las ideas occidentales. 

El salafismo es una escuela de pensamiento suní que surgió en la segunda mitad del siglo XIX como reacción ante las ideas occidentales. Vemos pues que sus orígenes son tratar de frenar la expansión del pensamiento occidental. Los salafistas están normalmente adscritos a la escuela de jurisprudencia Hambalí, una de las más estrictas. Uno de sus principales pilares son los escritos de Ibn Taymiyyah.
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Esta corriente de pensamiento se trata de evitar la libre interpretación los textos sagrados. Los salafistas, supuestamente son contrarios a la violencia sin embargo el rigidísimo, la interpretación literal y estricta de los textos sagrados han hecho que esta corriente se convierta en el origen del proceso de radicalización, el embrión o la base doctrinal de otras ideologías radicales que conformarán la base religiosa de grupos terroristas. Un elemento a destacar del salafismo es la introducción del concepto de reencontrar la pureza del Islam. La introducción de ideas, en cualquier credo, como la de la búsqueda de la pureza a cualquier precio, es un elemento peligroso aunque las intenciones iniciales sean sinceras pues este concepto puede ser usado por hábiles manipuladores como herramienta de radicalización de sus adeptos. Enmascarado bajo un ideal de nobleza fácilmente se puede retorcer la verdad y la realidad encontrándonos con el viejo mito de un lobo con piel de cordero. 

Arabia Saudí y el Wahabismo 

El wahabismo surge con la predicación de Ibn Abdu-I-Wahhab en el siglo XVIII quien pensaba que el declive de los países musulmanes frente a occidente es causa del olvido del mensaje original del Islam. Wahhab también adscrito a la escuela Hambalí predicó una interpretación literal y estricta de los textos sagrados. 

Muchas veces se ha confundido el wahabismo con el salafismo pues sus orígenes están en la jurisprudencia Hambalí. Dos vinos pueden tener la misma denominación de origen e incluso estar hechos de la misma uva pero tener sabores muy diferentes, una vez más los matices son importantes. Lo destacable del wahabismo es que Wahhab se alió con Ibn Saoud, el fundador de la dinastía saudí. Desde entonces el wahabismo se convierte en una corriente político-religiosa cuyas ideas serán difundidas por el Estado Saudí moderno.
 
Religión y política es una combinación poco deseable a criterio de las sociedades 
occidentales sin embargo hay muchas otras culturas en oriente, África y Asia que no sólo ven con buenos ojos esta unión sino que es la única opción que contemplan. Si el gobierno de una nación debe ser laico o religioso no es objeto de este artículo. Lo que sí cabe destacar es que desde un país con la riqueza de Arabia Saudí apoye sin ningún tipo de control a una rama del Islam que, si no se quiere considerar beligerante, por lo menos, ha sido o está siendo una herramienta, en manos de extremistas, para enaltecer el terrorismo y favorecer el proceso de radicalización de musulmanes suníes. 

Arabia Saudí se convirtió indirectamente en posibilitador del terrorismo, no sólo favoreciendo la base ideológica de muchas organizaciones terroristas con el wahabismo sino también proporcionando fondos que sustentarían económicamente a organizaciones terroristas. Los datos son abrumadores, por ejemplo: en 1994 el gobierno francés solicitó explicaciones a Riad a cerca de dinero saudí empleado para financiar organizaciones terroristas en Argelia. Ese mismo año el presidente Clinton cuestionaría la financiación de Hamas con fondos procedentes de Arabia Saudí. 

También en ese mismo año la embajada de Estados Unidos informó que aproximadamente 150 millones de dólares procedentes de Arabia Saudí fueron a parar a Bosnia como apoyo. De acuerdo con un informe del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de 2002, Al Qaeda y otras organizaciones terroristas obtuvieron entre 300 y 500 millones de dólares procedentes de organizaciones caritativas y 
donaciones privadas de origen saudí. 

Las organizaciones caritativas per se no son un herramienta mala, es más, son una 
herramienta excelente que suple los vacios que dejan los gobiernos y las organizaciones internacionales. Tampoco puede penalizarse a los donantes particulares a quienes debe otorgárseles el beneficio de la duda del desconocimiento del destino final de su dinero.
 
Lo que si son datos objetivos es que Arabia Saudí cumple de manera ejemplar con el tercer pilar del Islam, la limosna o zakat y que, lamentablemente, una cantidad ingente de ese dinero destinado a la caridad ha terminado en manos de organizaciones terroristas o xenófobas. En los años posteriores a los ataques del 11s el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas impulsaría la creación a nivel internacional de las herramientas necesarias para fiscalizar de manera imparcial el uso del dinero de la caridad para que no termine en manos de los terroristas.

La obra de Sayyid Qutb 

La obra de Qutb, Ma'alim fi al-Tariq, publicada en 1964, es conocida por muchos como una de las obras en idioma árabe más influyentes del último medio siglo así. Señales en el camino, no deja a nadie tibio.
 
El término jahiliyyah hace referencia en el Corán o en los escritos de ciertas escuelas 
islámicas a la ignorancia, en relación al mundo árabe previo al Islam o a cualquier cultura o civilización que se aparte de Dios. Qutb empleó por primera vez este término para designar a lo que él consideraba como musulmanes no ortodoxos ligándolo al fundamentalismo islámico. Con un afán revolucionario de sacar al Islam del estado de adormecimiento o ignorancia, Qutb propone una obediencia ciega a los preceptos de la Sharia para combatir la tibieza en el Islam.
 
Para restablecer el verdadero Islam es necesario, según Qutb, la creación de una vanguardia. Dicha vanguardia se mantendrá pura y ajena a todo aquello que no sea el Islam verdadero aunque sea familia, amigos, educación, etc. Además, la vanguardia debe luchar contra la jahiliyyah siguiendo un doble enfoque: la predicación para convertir al que se preste en un buen musulmán y el movimiento o la lucha por la cual se eliminaría por la fuerza cualquier organización y personal jahilí. 

Las tesis de Qutb son tan simples y poderosas como las que utilizaron los nacionalsocialistas en la Segunda Guerra mundial. Por un lado crea una división clara entre amigos y enemigos y por otro establece un programa basado en adoctrinamiento y acción violenta para llegar a la solución final.
 
Numerosos grupos terroristas islámicos se han visto notablemente influenciados por la doctrina de Sayyid Qutb. Ayman Zawahiri, mentor de Osama bin Laden y uno de los líderes de Al Qaeda así como el propio bin Laden leyeron las obras de Sayyid y de su hermano Mohammed Qutb. 

José Lorenzo-Penalva Lucas

Colaborador IEEE


http://www.ieee.es/Galerias/fichero/docs_opinion/2014/DIEEEO64-2014_FragmentadoIslam_Lorenzo-Penalva.pdf

Sé que es largo, pero merece la pena leerlo entero.

La ocupación de Iraq por parte de los Estados Unidos, la eliminación de todos los sunnitas de cualquier lugar donde pudiesen ejercer un mínimo de autoridad, el primar a los chiitas y entregarles todo el poder, unido al exterminio de toda la familia de Saddam Hussein (que no debería haberse permitido de eesa manera indigna, sin ni siquiera respeto pàra el que va a morir, mostrando Saddam mas entereza y dignidad que sus verdugos), ha exacerbado el odio a nivel mundial contra los chiitas - y despertado las ansias de venganza sunnis- y es lo que ha motivado que desde entonces se vengan sucediendo los mas terribles atentados contra chiitas aprovechando sus peregrinaciones (a nivel mundial).
No solo no solucionaron el problema de seguridad en Oriente Medio (era mucho mas seguro antes de la intervención americana), no han traido la democracia ni la estabilidad (economicamente estaban mucho mejor con Saddam Husein) y solo han reforzado al chiismo militante Iraní, sentando las bases para una guerra religiosa intermusulmana que desestabilizará profundamente a Oriente en un principio y al resto del mundo despues.¡
¿El Gran Satán ayudando a los chiitas?.
Vivir para ver.¡

CALZADA escribió:No solo no solucionaron el problema de seguridad en Oriente Medio (era mucho mas seguro antes de la intervención americana), no han traido la democracia ni la estabilidad (economicamente estaban mucho mejor con Saddam Husein) y solo han reforzado al chiismo militante Iraní, sentando las bases para una guerra religiosa intermusulmana que desestabilizará profundamente a Oriente en un principio y al resto del mundo despues.¡

Tal y como están las cosas, veo muy difícil que Iraq mantenga la cohesión nacional. De cualquier modo la alianza entre Arabia Saudí y EEUU puede sufrir una transformación inesperada en el momento en que el gigante americano sea independiente energéticamente.

En este foro estoy viendo cierto ensañamiento contra el Islam, partiendo de la base de que todas las religiones son sectas ¿porque no criticaís también a la iglesia catolica? tendra su lado oscuro digo yo, o se pone a parir a todas las religiones o a ninguna, lo mejor es respetar y punto.

no se si se pueden poner fotos de franco en el foro pero la pongo para que se vea la compañia no soy fraquista ni nada de eso.........

Manu escribió:

¿Estás sugiriendo que Su Santidad El Papa Benedicto XVI es o fue nazi?

¿Sabes lo que fue el alistamiento forzoso? ¿Todos los que hicieron el servicio militar en España entre 1939 y 1975 eran FRANQUISTAS? Porque claro, todos se hacían fotos y todos sirvieron en el ejército de Franco. ¡MENUDA LÓGICA CHAVAL!

El prejuicio irracional y el odio a los católicos se cura viajando.

¿Saben quien es este hombre? Larry Brinkin, activista del movimiento LGTB, creador del concepto de "parejas de hecho". CONDENADO por pertenecer a una red de pederastia.

En este foro estoy viendo cierto ensañamiento contra el Islam, partiendo de la base de que todas las religiones son sectas ¿porque no criticaís también a la iglesia catolica? tendra su lado oscuro digo yo, o se pone a parir a todas las religiones o a ninguna, lo mejor es respetar y punto.

Estimado Manu. Gracias por intervenir en el hilo. Sobre la Iglesia Católica y su degeneración se podría hablar largo y tendido. No obstante y para tu tranquilidad, el despliegue de medios en contra de ellas es inmenso tanto en diversos medios de comunicación como en la actividad política u pública de muchas personas. Así que poco podemos aportar más en este foro al respecto.

¿Por qué no critico a la Iglesia Católica? Bueno no voy a ocultar un hecho fundamental: Soy católico. Hay otras religiones pero considero que el Cristianismo y todas sus iglesias son la base fundamental de mi civilización. Hay cosas que están mal y deben mejorar, por supuesto. Pero desde luego no pienso poner al Islam y al Cristianismo en un plano de igualdad en el cosmos político que deseo para Europa. Sé que es injusto. El mundo lo es. Yo hablo de lo que me gusta y no me gusta y el Islam (o al menos la vertiente de éste el Wahabismo) no me gusta un pelo. 

No me gusta y no le doy más vueltas. No me gusta ver mujeres con una sábana de la cabeza a los pies mientras pasean junto a sus maridos con barba y chilaba rodeados de una piara de niños. No me gusta la cosmovisión que tienen del universo y del mundo humano en general, donde la religión hiper-regula la vida de la gente en una nueva versión inédita en Europa desde ante de la Ilustración. 

Entonces nos encontramos en una encrucijada. Por una parte Europa ha apuntalado un estado donde la pluralidad de pensamiento es aceptada. Sin embargo bajo esta fórmula ha penetrado en ella una comunidad que juega a dos bandas: se aprovecha de este marco legal para implantarse y nutrirse de nuestro sistema para crecer y por otro lado lo desprecia desde su punto de vista ético y religioso y en cuanto pueden imponen su religión como dominante en los territorios en los que alcanzan la masa crítica necesaria para llevar a cabo dicha política. 

Así que no querido Manu. No me gusta el Islam que estoy viendo delante de mis narices. No empatizo con ellos, ni con sus ideas, ni con su estética ni con lo que desean para el mundo. A decir verdad, apoyaré a todo aquel que tenga tan claro como yo que ese no es el futuro que desea para la nación.