El 6,5

Hola: No sé si esta justificado el corte de acceso a becas en el famoso 6,5 de Wert. Pero lo que está claro, es que si la sociedad te paga los estudios, te esfuerces un poquito, al menos un poco y no te dediques a tiirar el curso por la borda, que haberlos los hay.  Conozco de cerca, muy de cerca la Universidad, y  siempre hemos comentado que había  "Una beca, un coche"  .  Y dejar el curso a la mitad, también bastantes, de todo tipo, becados y no becados, y tampoco hay derecho. Porque ese dinero sale de los impuestos de todos y del trabajo a veces muy duro, de todos,  y el fraude hay que perseguirlo y no financiarlo.  Me da igual que robe como ha robado Barcenas o el Parado que además cobra en negro.  Pues son todos fraudes, y el alumno que no va a clase o se pasa el curso en las batuecas, es un fraude al dinero de todos.

si le viésemos las notas del colegio a nuestros políticos quedaríamos asustados, algunas ya circulan por el facebook

Las peores notas las ha sacado Iñaki Oyarzábal, Secretario general del PP del País Vasco.
Se rumorea que no ha finalizado el Bachillerato

¿Rajoy sacando un 4 en Lectura, Escritura y Lengua española? Ahora se comprende que sea incapaz de leer sus propias notas... 
http://politica.elpais.com/politica/2013/02/11/videos/1360606709_983953.html




En cuanto al tema del 6,5... el ministro puede poner la nota que estime oportuno para conceder becas, pero entonces tendrá que explicar por qué no es clasista que no le exija esa misma nota para aprobar a otra persona solo por el hecho de que "tenga más dinero" y no necesite una beca, pues si el alumno "pudiente" no llega a esa misma nota también está malgastando dinero público, dinero de todos, al ocupar una plaza y hacer perder el tiempo a los profesores que le dan clase, y a los que pagamos todos, no solo su "pudiente" y privada economía.

Amiga Ema 51: Tu sabes de gente que abandonan a mediados de curso tras recibir sus becas.
Yo conozco a quienes no llegan ni a medio curso y nada mas cobrarlas, dejan de asistir a clase y se les empieza a ver por el pueblo de bar en bar, y encima presumen de ello.
En mis tiempos, para acceder a la Universidad se exigia un 7, y no un mediocre 5,5 como se ha venido haciendo hasta ahora, y ya estamos viendo los resultados, donde hay gente con sus titulos ya conseguidos, que cometen hasta faltas de ortografia, o no saben situar algunas provincias de España en el mapa, y ninguna de las Universidades Españolas está entre las mas destacadas a nivel mundial.
El Sr. Wert queria imponer un 6,5 y lo veo muy correcto, porque un chaval que de verdad quiera estudiar una carrera y sacrificarse para conseguirla, lo mismo le da que sea una puntuacion u otra, porque va a responder.
Pero la izquierda española, siempre queriendo igualar, pero por lo bajo, y soltando la demagogia de que se quiere privar a la gente mas humilde de acceder a la Universidad cuándo no es cierto.
Si una persona de baja condicion economica quiere estudiar, nada se lo impide porque si rinde nadie le va a poner pegas, y va a tener su beca, al igual que si fuera de una familia más pudiente.
Claro que a los vagos de profesion, les interesa que cuando mas baja sea la puntuacion, mejor para ellos. Y ya sabemos cual es su ideologia. Acceder a las becas para darse la vida padre a costa de los impuestos que pagamos los ciudadanos.
Yo me negaria a seguir manteniendo a vagos, que van pasando de curso con tres o cuatro asignaturas no aprobadas, pero la Ley me lo impide.

Himnos: Tu ya sabes que Rajoy no es precisamente  santo de mi devoción. Pero si se destaca que de niño era un semicafre, como se demuestra en el documento que has plasmado, tambien deberias exponer cuándo fué el numero uno de su promoción, y tambien en el concurso para acceder a su plaza.

Y en cuanto Oyarzabal, que tampoco me resulta simpatico, habria que preguntarse, si quien ha dado a conocer estos expedientes, tambien lo ha hecho con gentes de la izquierda. Seguro que nos llevariamos muchas sorpresas.
Como anecdota os diré que en el Junta de Andalucia hubo un Consejero de Agricultura que se llamaba Manuel Manaute que tenia una pinta de palurdo que se la pisaba. Y no es que solo lo pareciera, sino que además lo era.
Cierta vez un periodista le preguntó los motivos por los que habia alcanzado tan alto cargo, a lo que respondió:
"Es que yo se mucho de agricultura, porque me he pasado bastantes años recorriendo los campos montado en mi "amotillo".
Asi que como vereis, en todas partes cuecen habas.

Trajano.v escribió:El Sr. Wert queria imponer un 6,5 y lo veo muy correcto, porque un chaval que de verdad quiera estudiar una carrera y sacrificarse para conseguirla, lo mismo le da que sea una puntuacion u otra, porque va a responder.

Nadie está diciendo que los vagos y los caraduras deban ser primados con dinero público, Trajano. Lo que pasa es que, mirada con detalle la "imposición" (curioso que hayas empleado ese verbo, porque un ministro de una democracia debería dedicarse menos a imponer y más a conseguir acuerdos mayoritarios, que luego cambia el gobierno y cambia la ley de Educación, y así es imposible) de Wert no permite discriminar, como insinúas en tu defensa, entre vagos y estudiosos, a no ser que consideres que un estudiante con una nota de 6 en Bachillerato y un 7 en Selectividad, debe quedarse sin beca al obtener una media ponderada de 6,4.  ¿Acaso es un vago? ¿Es un mal estudiante? ¿O es una mala ley?

HIMNOSHISTORICOS escribió:si le viésemos las notas del colegio a nuestros políticos quedaríamos asustados, algunas ya circulan por el facebook

¿León? ¿León? Si Rajoy nació en Santiago de Compostela y pasó toda su infancia en la ciudad de Pontevedra, donde su padre (también llamado Mariano Rajoy) era el Presidente de la Audiencia Provincial de Pontevedra...

No me termino de fiar de esa imagen (por la razón que acabo de citar). A lo mejor es un fake.

Rajoy vivió y estudió en León hasta los 15 años.http://www.diariodeleon.es/noticias/afondo/cuando-rajoy-era-marianin_654817.html

A mí me constaba otra cosa (por cierto, el lugar en el que aparece Rajoy en esa foto en ese enlace es O Grove, que está... en la provincia de Pontevedra, no en la de León (donde, a fin de cuentas, no hay costa):

http://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/rajoy.htm

"Mariano Rajoy pasó toda su infancia en tierras gallegas."


[url=http://www.abc.es/personajes/famoso.asp?biografia=Mariano rajoy&historia=85]http://www.abc.es/personajes/famoso.asp?biografia=Mariano%20Rajoy&historia=85[/url]


"Nieto de Enrique Rajoy Leloup, uno de los redactores del primer Estatuto de Autonomía de Galicia refrendado por los gallegos en 1932 e hijo del presidente de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ciudad donde creció."

La foto de O Grove es de 1970. Si nació en 1955, en 1970 tenía 15 años, así que en principio no hay discordancia entre la foto y lo que se cuenta de él en el artículo, que pasó en León entre los 5 y los 15 años.

Bueno, aunque Rajoy no tengo ni el graduado escolar, lo veo muy correcto eso.

Y lo más importante, el que reciba becas y no termine sus estudios, ese dinero se tiene que devolver.

Porque de ponernos a ver con el ¿Y tú?... esto no sube.

Este ministro, bastante conflictivo por cierto, tiene alterada a toda la comunidad educativa entre otras comunidades.

A quién se le ocurre hacer un corte con una nota, la que le apetece al señorito, para que queden sin acceso a las becas una parte importante de nuestros jovenes.

No obstante deberíamos tener algo más de cuidado con toda esta inmensa tropa de gente que inician sus estudios....para probar...y a las primeras de cambio lo dejan...

Pues si lo dejan que devuelvan la beca, así de fácil sobre las notas de los políticos solo demuestra que muchos han sido y son unos tarugos, un presidente de un país no puede desconocer el inglés como los dos últimos que hemos tenido asta ahora, el inglés se le pide a un camarero a un presidente de un país mas aun .

¿Habrá gente que se gaste la beca en..... fiestas y cachondeo, por ejemplo?

Aunque el ejemplo sea aldo exagerado me gustaría más opiniónes de los estudiantes que andan por el foro.

Valle escribió:¿Habrá gente que se gaste la beca en..... fiestas y cachondeo, por ejemplo?

Aunque el ejemplo sea aldo exagerado me gustaría más opiniónes de los estudiantes que andan por el foro.

Pues (y la opinión que voy a formular en este mensaje la digo como estudiante, de Ingeniería Industrial) sí conozco gente, tanto de mi curso como conocidos en otros cursos y/o grados, que hacen eso y luego suspende varias asignaturas, pero que pueden desde el punto de vista académico (luego hay que tener en cuenta también los requisitos de tipo económico, que desde mi punto de vista hasta ahora han estado descompensados, pondré un ejemplo para que se me entienda a que me refiero. Conozco algunas personas -estudiantes como yo- provenientes de la Cantabria rural cuya familia es propietaria de terrenos pequeños o de algunas cabezas de ganado bovino -la ganadería en Cantabria ha sido en buena parte limitada y desmantelada -no del todo, pero sí suficientemente importante, hasta el punto de que España ha de importar considerables cantidades de leche extranjera cuando en el pasado, antes del desmantelamiento, la ganadería asturiana y cántabra sobre todo podía abastecer de forma competitiva a todo el mercado nacional e incluso competir en el extranjero, razón por la cual la UE y los gobiernos traidores a España combatieron nuestra ganadería para favorecer al sector primario francés-, sobre todo, por el Gobierno de Felipe González para el acceso a esa desgraciada UE, pero esto es otra historia sobre la que en este mensaje no me voy a extender-, cuyos ingresos son tanto o más modestos que los de familias obreras y que, a diferencia de estas, por poseer una modestísima propiedad, no puede acceder a esas becas, a pesar de la modestia de la economía doméstica de sus familias. Pienso que esto es algo que hay que revisar y reformar). Hasta ahora los requisitos académicos requeridos para concedersele una beca a un estudiante han sido, en mi opinión, bastante bajos (especialmente en grados distintos a las distintas Ingenierías, Física o Matemáticas), sencillamente me parece indignante que se pueda conceder becas a gente que suspende asignaturas o que tiene una nota media bastante mediocre como puede ser un 5. En mi opinión las becas han de concedérsele solo a gente que apruebe todas las asignaturas y que obtenga una nota mínima de un 7 (es decir, un notable), además de contar con una economía doméstica modesta (aunque en este sentido haría reformas como la que he indicado más arriba en la legislación actual). Todo lo que baje de eso me parece, sencillamente, que el estudiante en cuestión no es lo suficientemente brillante y/o trabajador para ser digno de que se le destine una partida de dinero procedente, a fin de cuentas, de los sufridos contribuyentes españoles -recordemos que la presión fiscal que sufrimos los españoles está entre las más altas de Europa y del mundo entero ya a día de hoy y tras las sucesivas subidas de impuestos de los últimos años-. También opino de forma similar en lo referido a los requisitos para entrar en la universidad -en esto soy partidario de mucha mayor meritocracia que la existente tanto a día de hoy como tras la ley Wert, que no busca una mayor meritocracia, aunque trate de hacer guiños, falsos, falaces, en este sentido-, dado que hasta ahora no solo han sido, excepto en determinadas carreras como Medicina, bastante bajos de acuerdo a la dificultad del desempeño del Bachillerato y la Prueba de Acceso a la Universidad o PAU (lo cual por otro lado también da a indicar que el nivel educativo de los niveles preuniversitarios deja mucho que desear, dicho sea de paso, debería endurecerse desde el punto de vista académico el Bachillerato, además de que así los alumnos llegarían mejor preparados a la universidad de lo que llegan ahora, por lo cual en no pocos casos la hostia al llegar al nivel universitario suele ser de órdago para no pocos estudiantes) (aunque en esto juega un papel importante el hecho de que la Casta política, bajo el lema populista de que "el hijo del obrero ha de ir a la universidad", se ha dedicado a tratar de promover una especie de "burbuja de universitarios", otra cosa a destacar es que gracias a esto, disfrazándolo de la "democratización de la universidad", ha proliferado por doquier universidades en prácticamente todas las provincias del país (con la inversión pública que ello requiere, que en no poca medida habrá ido a parar a los mismos bolsillos que la burbuja de los AVES o de infraestructuras-), también se ha hecho de ese modo con el objetivo de retrasar al máximo la incorporación de la población juvenil al mercado laboral, reduciendo así de forma bastante artificial las cifras y estadísticas de desempleo. No solo esto, sino que, más grave aún, la llamada "burbuja universitaria" ha servido para que se halla formado una auténtica Casta endogámica, numerosa y muy privilegiada formada por catedráticos y profesores universitarios, al amparo de este proceso favorecido por el poder político, y muy relacionada con el mismo, como todas las Castas que padecemos en el solar patrio). Sin ir más lejos, el rector -tanto los anteriores como el actual, elegido hará cosa de año y medio- de una pequeña universidad como es en la que estudio, la Universidad de Cantabria, cuentan con coches oficiales). Sospecho que la reforma de Wert en este sentido, aunque es una mejora respecto a la situación actual desde mi punto de vista, no deja de ser insuficiente en algunos aspectos. En este sentido, de todos modos, no deja de ser una mejora respecto al cachondeo que era la asignación de becas hasta este momento (y de esto podría contar, como quien dice, mil anécdotas vividas en persona), por lo menos para alguien como yo que considera que las becas solo han de ser accesibles para gente que se lo gane en el desempeño de sus estudios, es decir, promover así la meritocracia estudiantil.

Lo que realmente va a causar estragos para muchos estudiantes y sus familias, más aún en momentos como los actuales en que los ingresos de gran parte de las familias españolas no hacen más que disminuir, no es, en mi opinión, este asunto de las becas al que tanto pábulo están dando tanto los mass media como los partidos políticos de la oposición, sino la inmensa subida de tasas universitarias que la reforma educativa que está llevando a cabo Wert y el actual Gobierno plantea. Esto es más grave que el debate sobre los requisitos académicos de las becas al que tanto bombo se le está dando. Claro que en eso las directrices a seguir están claras, por lo visto, con cualquiera de los partidos políticos de la Casta. Por algo será (pues estas cosas jamás suceden por casualidad) que, a la vez que se le da tanto bombo y platillo a la cuestión y el debate político sobre las medidas tomadas por Wert en la cuestión de la beca a la par que, curiosamente, apenas se menciona absolutamente nada, silencio absoluto y total en el ámbito mediático -y por los partidos políticos y agentes supuestamente contrarios a la llamada ley Wert-, sobre la gran subida de las tasas universitarias. Que es la que realmente nos va a joder, por decirlo de algún modo, a la inmensa mayoría de los estudiantes, y a la que sí me opongo firmemente. Yo soy partidario de que la universidad se rija de una forma mucho más meritocrática que la actual (¿o es que creen que el hecho de que no halla universidades españolas entre las mejores del mundo a la hora de formar a los estudiantes es algo casual?), no de que se trate de reducir la afluencia a las universidades por la vía económica.

¿¿¿Nadie, pero nadie de verdad se siente extrañado de que este señor (Mariano Rajoy) sea licenciado en derecho y sacase las oposiciones a registrador de la propiedad a la primera???, ¿¿más sabiendo a que se dedicaba su padre y viendo la incompetencia absoluta a la hora de aprender idiomas o dar un discurso sin mirar un folio??

Ya entrando en materia, hay que decir que no es lo mismo un 6,5 en una asignatura jodida de por ejemplo, ingeniería de caminos o telecomunicaciones que en una asignatura jodida de empresariales o turismo...Vamos, que no hay color...Hay que tener en cuenta de que estudios estamos hablando.

Buenas opiniones, gracias.

Estoy de acuerdo en que la subida de tásas puede ser bastante escabrosa , económicamente hablando, para llos bosillos tanto de familias como de estudiantes.

Nuestras lumbreras de la casta politica no paran de crear injusticia.....

En 1814, José María Blanco White, uno de esos españoles ilustres que merecen la pena, se preguntaba: “¿Cómo crecen las artes y la civilización en los pueblos?" Y la respuesta que daba el pensador sevillano era sugerente: "El reino de las leyes y del orden civil debe prevalecer. De las leyes nace la seguridad; de la seguridad, la curiosidad, y de la curiosidad, el saber".

Sólo un país ignorante no se daría cuenta de la importancia del conocimiento, que no es únicamente un factor esencial para que avance la productividad, sino que cumple un papel determinante en la legitimación social de las decisiones políticas. Las leyes que no están avaladas por el conocimiento profundo de las materias que tratan son, en realidad, leyes huecas condenadas a morir de forma temprana.

Como sostiene el profesor Daniel Innerarity, la vieja cuestión acerca de las relaciones entre el saber y el poder se remonta a la teoría platónica del filósofo-rey, pero en la edad contemporánea esa dicotomía se ha traducido en dos figuras que representarían el tipo de saber que debe guiar a la política. En su versión de derechas estaría la figura del experto y en la de izquierdas, la del intelectual. El experto encarna a la superioridad de la ciencia y sería el abogado de la objetividad. El intelectual, por el contrario,pretendería hacer valer una superioridad moral y, en vez de objetividad, lo que ofrece es un saber crítico y comprometido. 

Expertos e intelectuales, sin embargo, juegan hoy un papel irrelevante en la vida política. Los nuevos filósofos son los cocineros que incluso hablan de tortillas deconstruidas, convirtiendo al pobre Jacques Derrida en un vulgar pinche de cocina. En realidad, no es ninguna novedad. Ya Nietzsche afirmaba con mucha ironía que el único poeta y filósofo que quedaba en Alemania era Bismarck. Nietzsche criticaba con saña el empobrecimiento cultural de su país, mientras que Thomas Mann, años después, diría que el Reich alemán había sido una decepción cultural: "Alemania, otrora profesora del mundo, carecía entonces de grandeza intelectual. Era fuerte, nada más", clamaba con pena el escritor hanseático.

Esta banalización de la cultura y del conocimiento explica que la crisis se esté llevando por delante buena parte de los principios que se creían asentados. Y ahora hablar de cultura -incluso de conocimiento- es sinónimo de gasto público. Sin duda, por los excesos cometidos en el pasado. El país asiste con los brazos cruzados a los recortes en investigación como si se tratara de una maldición bíblica.

Jorge Semprún, nada sospechoso de ser un agente de la Trilateral o del Club Bilderberg, solía decir, parafraseando la célebre frase del escritor filonazi Hanns Johst ("cuando oigo hablar de cultura, quito el seguro de mi Browning"), que los socialistas oían hablar de cultura y se echaban la mano a la cartera. Y en verdad, esa es la impresión que tienen muchos ciudadanos: hablar de cultura es lo mismo que sangrar el bolsillo de los contribuyentes. Para cierta derecha, por el contrario, la cultura es sinónimo de gorrones que viven de la subvención. Y hasta un sujeto como Millán-Astray lanzó aquel célebre: "¡Muera la inteligencia!".

Probablemente, en el fondo de esa percepción se encuentra una visión reduccionista de la cultura entendida como mero entretenimiento. En línea con lo que criticaban los pensadores de la Escuela de Fráncfort, para quienes la consolidación de una industria de la cultura de masas acabaría por convertir al ciudadano en un consumidor pasivo incapaz de emitir un juicio cabal sobre lo que observa. Tanto Adorno como Walter Benjamin sostenían que con la cultura de masas la libertad quedaba reducida a elegir entre los mismos productos pero etiquetados con distintos nombres, lo que necesariamente conducía a la alienación. Las subvenciones no son un fin en sí mismo, sino un medio para lograr determinados objetivos. Y si no se sabe para qué sirve la Universidad, difícilmente se podrá conocer la utilidad de las becas.

Este es, en realidad, el fondo del problema cuando se convierte la cultura en un mero espectáculo. Pero la cultura, en el sentido más amplio del término, no tiene sólo que ver con subvencionar el teatro, la música o el cine. Cultura cívica es cuando millones de brasileños salen a la calle no sólo para protestar contra la carestía de la vida, sino también contra la corrupción del Gobierno. Cultura política es cuando los ciudadanos protestan porque mientras los políticos discuten de sus cosas, distraídos en lo insignificante, hay un montón de problemas que esperan ser abordados. Y cultura democrática no es otra cosa que tener capacidad real de elegir entre distintos candidatos de acuerdo a la lógica y a la racionalidad de los programas, y no al socaire de los impulsos primarios que desatan las falsas ideologías y los populismos. La cultura, por lo tanto, forma parte de nuestra vida más íntima y renunciar a ella es despojarnos de nuestra propia identidad.

Y el reciente debate sobre las cuantías y los requisitos que exigirá el Gobierno para tener derecho a una beca pone de relieve hasta qué punto la Universidad -cátedra de las ideas y de la cultura- cumple un papel irrelevante en la sociedad. Se discute sobre cómo entrar a las aulas y en qué condiciones deben hacerlo los estudiantes, asunto sin duda capital, pero no sobre el papel que debe jugar la Universidad en una sociedad desarrollada que mira sin inmutarse la degradación permanente de su función social. Desconociendo, como sostenía el propio "informe de expertos" que encargó en su día el ministro Wert, que universidades como Berkeley, Cambridge, Stanford o el MIT han contribuido a la creación de innumerables empresas.

El origen de Google, por ejemplo, está en un nuevo y eficaz algoritmo de búsqueda de datos en Internet desarrollado por dos estudiantes de doctorado en Stanford, y mucho antes el descubrimiento del electrón por un laboratorio de la Universidad de Cambridge puso los cimientos del desarrollo económico.

Entonces, por tanto, considero que la pregunta que hemos de hacernos en el momento actual es la siguiente:

¿Para qué sirve la Universidad?

Lo relevante, por lo tanto, no es cuántas tasas hay que pagar o si la política de becas es la acertada, sino el papel que juega la Universidad en este momento histórico, pero este asunto no parece llamar mucho la atención. Se sigue considerando que las becas son ante todo un subsidio mayoritariamente estatal, una cantidad de dinero que se aporta al estudiante a fondo perdido, que permite a los más pobres y, casi por derivación, a los mejores poder estudiar. Pero las subvenciones no son un fin en sí mismas, sino un medio para lograr determinados objetivos. Y si no se sabe para qué sirve la Universidad, difícilmente se podrá conocer la utilidad de las becas. España está ensimismada en sus propias miserias y continúa enfrascada en pequeñas escaramuzas que no abordan los problemas de fondo. Pero este país cuenta con 50 universidades públicas y 31 privadas repartidas en 236 campus para atender a millón y medio de universitarios.

España está ensimismada en sus propias miserias, y en lugar de poner las luces largas para identificar el camino que debe seguir, continúa enfrascada en pequeñas escaramuzas políticas (la utilización de las becas con fines propagandísticos) que no abordan los problemas de fondo. Y que tienen mucho que ver con el hecho de que este país cuente con nada menos que 50 universidades públicas y 31 privadas repartidas en 236 campus para atender a cerca de millón y medio de universitarios. Y en las que se imparten a menudo las mismas disciplinas sin producir apenas valor añadido. Generando multitud de ineficiencias y duplicidades que sólo conducen al abatimiento general. Hablar de becas sin mencionar para qué sirven es un auténtico despropósito.

Parece razonable pensar, por lo tanto, que antes de discutir sobre la cuantía de las becas, el país reflexione sobre qué tipo de Universidad necesita. Si centros masificados convertidos en una inmensa guardería de alumnos y profesores (mal pagados y desmotivados) o si opta por una universidad de excelencia -que no es lo mismo que una universidad de élites- destinada a romper las fronteras del conocimiento. Y el hecho de que ninguna Universidad española esté entre las 200 mejores del mundo refleja que este no es el camino.

Con razón, Ramón y Cajal recuerda en sus memorias que los senadores romanos, cuando los bárbaros estaban a la puerta de Roma, seguían discutiendo sobre quién había creado la luz. No son los únicos.

Persia escribió:¿Rajoy sacando un 4 en Lectura, Escritura y Lengua española? Ahora se comprende que sea incapaz de leer sus propias notas... 
http://politica.elpais.com/politica/2013/02/11/videos/1360606709_983953.html




En cuanto al tema del 6,5... el ministro puede poner la nota que estime oportuno para conceder becas, pero entonces tendrá que explicar por qué no es clasista que no le exija esa misma nota para aprobar a otra persona solo por el hecho de que "tenga más dinero" y no necesite una beca, pues si el alumno "pudiente" no llega a esa misma nota también está malgastando dinero público, dinero de todos, al ocupar una plaza y hacer perder el tiempo a los profesores que le dan clase, y a los que pagamos todos, no solo su "pudiente" y privada economía.

  La verdad que no es justo, pero también es cierto que hay quienes no aprovechan esa beca, es complicado, realmente.

Vale, fácil no es, pero...¿de verdad la solución pasa por  abordar este tema como un elefante en una cacharrería, cuando los temas educativos es mejor abordarlos con el mayor consenso posible para evitar el consabido trueque de asignaturas, leyes y decretos en función del gobierno de turno? 

Y luego lo otro, si de verdad se quiere defender la igualdad de oportunidades, que no se hagan las cosas de tal manera que quien tiene más dinero cuente con ventaja para seguir estudiando.